Diario Panamá América
8 de noviembre 2014
Pueblos
Mágicos
Jaime
Figueroa Navarro
Durante
el simposio mundial de patrimonio histórico celebrado en la Universidad de
Massachusetts-Amherst el año pasado, donde fui convidado a dictar una
conferencia tapizando la temática del Adelantado Balboa y la imponente huella
de su hallazgo en el Darién istmeño hace 5 siglos, tuve la oportunidad de
conocer y congeniar con la muy campechana Dra. Claudia Rodríguez Espinosa, Coordinadora de la Maestría en Arquitectura, Investigación y Restauración
de Sitios y Monumentos de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo,
quien nos ilustró sobre el programa de Pueblos Mágicos de la Secretaria de
Turismo de México.
El proyecto que data de inicios de siglo, reconoce a quienes
habitan los pueblos seleccionados y el trabajo que han desarrollado para
proteger y guardar su riqueza cultural. En
buen cristiano, el entorno de cada uno de ellos varía desde la fuerte
influencia del pasado indígena, el gran legado del antiguo imperio colonial
español, la preservación de tradiciones seculares y ancestrales, e importantes
lugares de acontecimientos históricos en la vida del país. Profundicé pesquisas de la propuesta,
encontrando como siempre criticas y múltiples evidencias de auténticos logros
en el desempeño del turismo provincial.
Los mexicanos son especialmente exitosos en la rama de turismo, razón
por la cual sus homólogos en El Salvador, Ecuador, Colombia y Chile han
contratado a la Secretaria de Turismo de México para replicar iniciativas
similares.
Todo esto lo tenia atesorado en el desván de los
recuerdos cuando recibí una fascinante invitación a la boda de mi apreciado
amigo Don Julio Ross Anguizola con la guapísima Dra. Alicia Martínez Flores,
dermatóloga azteca oriunda de Rio Bravo, Tamaulipas. La mágica diferencia que resaltaba en el agasajo
era su agregada gira turística de 4 días durante el festivo patrio en Jalisco,
región mexicana que a pesar de haber visitado 8 de los 31 estados unidos mexicanos, aun desconocía. El precio de la excursión, todo incluido a
$500 por persona, en adición al gran cariño que observo por la pareja, sirvió
sin duda como imán para sumar un centenar de curiosos compatriotas, incluyendo
una nutrida delegación chiricana, provincia de origen del afortunado novio.
Estando sobrevendido el vuelo directo a Guadalajara de
COPA el viernes pasado, optamos por viajar el día anterior sumando así fuerzas
para la ajetreada agenda.
Siempre hemos sido críticos de la esterilidad de Tocumen
como centro de ventas país. Para añadir
a la lesión, en esta ocasión descubrimos en la terminal un gigantesco y
atractivo afiche que invita al pasajero a redundantemente visitar la hermana
republica, con el recado Colombia es realismo mágico. Me pregunto si los encargados de la
venta publicitaria en los aeropuertos de El Dorado en Bogotá, Rionegro en
Medellín o Alfonso Bonilla Aragón en Cali, permitirían el despliegue de un símil
anuncio istmeño en sus facilidades, amén que Tocumen ni siquiera resalta el
cumulo de las indudables riquezas que nos obsequia la naturaleza, cultura e
historia.
Sin duda alguna la misa de acción de gracias en la celestial
capilla de Santa María dentro del conjunto del Mesón de San Agustín en
Tlajomulco de Zúñiga el lunes 3 de noviembre subrayó con broche de oro nuestra
aventura que incluyó sendas visitas a Tlaquepaque, simpático poblado artesanal;
la destilería Herradura en Amatitlán y La Cofradía en la ruta del tequila al
igual que una visita al centro histórico de Guadalajara donde resalta el
Hospicio Cabañas, declarado Patrimonio de la Humanidad en 1997.
Sobremanera descollaron los detalles, la genuina actitud
hospitalaria y amabilidad de los anfitriones, descubriendo un destino libre de
basura, con amplias aceras y veredas, que le diferencian al istmo. Bien valdría la pena, contando con tantos y
únicos encantos, complementar nuestro Plan Maestro de Desarrollo Turístico
2007-2020 con la integración de un programa de Pueblos Mágicos que nos permita
positivamente multiplicar nuestras anémicas cifras de visitantes.
que buen articulo don jaime,felicitaciones y ojala sean tomas en cuenta tus atinadas recomendaciones,saludos,fm.
ResponderEliminarInteresante artículo. La Fundación Natá de Los Caballeros lo invita a tener una experiencia con la esperanza que también sea mágica.....Felicidades
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